Algunos prefieren estar en la cama, y otros en el sofá o moviéndose por la casa. Es recomendable que la habitación no esté muy caliente, abrir las ventanas para ventilar y mantener una higiene adecuada.

En los primeros días puede que no quiera comer. No hay que empeñarse en que tome alimentos a menos que el niño lo desee, ya que de forma progresiva suelen recuperar el apetito. Conviene que beba líquidos para que esté hidratado (agua, jugos, caldos,). Cuando tenga apetito se le pueden ofrecer pequeñas porciones de alimentos y lacteos.

Muchas enfermedades, como la gripe y los refrios, se curan por sí solas con las medidas habituales. No hay que utilizar antibióticos,a menos que el médico lo recomiende, y recordar que los medicamentos para la tos no se deben utilizar en los niños pequeños

Para aliviar el malestar se pueden utilizar los antitérmicos y analgésicos habituales como el paracetamol, dipirona, ibuprofeno. Se debe evitar el uso de aspirina .

Conviene seguir las recomendaciones de su medico tratante hasta la recuperación y en cualquier caso permanecer en casa al menos hasta 24 horas después de que la fiebre haya desaparecido.